sábado, 9 de enero de 2016

Un país sin rostro culpable.

Acompaño total y rotundamente las declaraciones del nuevo vicepresidente ejecutivo de la república Aristóbulo Istúriz en cuanto pintar más de mil murales de Chávez por el país. Venezuela necesita ver el rostro de la violencia, la desidia y la pobreza, y no solo sus ojos escondidos ante la derrota y el quiebre moral, que es la consecuencia más clara de su obra.

Pintemos murales de Chávez en las paredes detrás de las largas colas que hacemos a diario los venezolanos y llenemos de afiches los anaqueles vacíos, para que los venezolanos puedan ver frente a frente gracias a quien padece las dificultades de no poder abastecerse, de perder empleos por largas colas y no poder pagar, por su pésimo poder adquisitivo, la canasta básica.

Pintemos murales del ex presidente con bata blanca y estetoscopio en los distintos hospitales, clínicas, CDI, ambulatorios, barrio adentro y demás centros asistenciales de salud, donde no hay reactivos, yelco, camas, suero y demás insumos. Llenemos de afiches las paredes donde la gente tirada espera ser atendidos y las distintas áreas llenas de contaminación y deterioro.

Pintemos murales en Uribana, en Rodeo, en Tocorón y Tocuyito, para que los reos que viven en hacinamiento y en condiciones pésimas, gracias a un sistema penitenciario que se ha convertido en otro guiso rojo, puedan ver la cara del culpable. Que se entreguen volantes con el rostro de Chávez cuando se vaya a pagar un secuestro o para que devuelvan un vehículo en las celdas de los pranes.

Pintemos murales del Comandante Eterno, con el Ché y Fidel, en todas las bases militares del país, para que realmente “Chávez viva” en el tutelaje cubano en nuestras fuerzas armadas, en la fobia a la meritocracia, en la corrupción interna de nuestros cuarteles. Que no se quede ni una bala, ni una peinilla y ni una lacrimógena sin su rostro. Que los venezolanos veamos de cerca el verdadero legado al ser reprimidos.

Pintemos murales de Chávez en todas las universidades sin presupuesto, en todos los salones para matar las ideas y los comedores para aguantar el hambre. Pero eso sí, que no queden clases donde profesores valientes hablen de las problemáticas del país y sus causas, que todos sepamos quien es el responsable, ya que no podrán tatuarnos a los estudiantes ese rostro en nuestros valientes corazones.

Pintemos a Chávez en todos los aeropuertos, dándole la despedida a todos los venezolanos que se van de su país al no ver un futuro claro. Que mire profundamente la cara de las madres que se despiden de sus carajitos. Que peguen afiches en las fronteras y puertos, que todos sepan que exportamos ingenieros, médicos, mentes y ganas de trabajar, pero que importamos corrupción y metemos contrabando.

Pintemos todos los barrios de rojo, sin derecho al pataleo, y pongamos la cara y el nombre de Chávez donde hay más pobreza en el país, que se sienta las promesas rotas de hace 15 años de sacarlos de ahí, de una casa digna y de servicios de calidad. Pero eso sí, pongamos el rostro de Chávez bien lejos de las mansiones de los boliburgueses para no incriminarlos.

Pintemos el rostro de Chávez en espacios revolucionarios, como morgues, cementerios y canales donde aparecen los asesinados de este país. Que se coloque a la entrada de Bello Monte, la morgue de Caña de Azúcar o en la forense de Maracaibo. Y aguantemos las lágrimas carajo, al ver al forense dándonos un volante también con el rostro de Chávez.

Los venezolanos tenemos varios rostros que nos llenan de orgullo y nos dan fuerza y dignidad a diario. Pero somos un país sin rostro en cuanto a culpables, es hora de pasar de ser un país sin rostro culpable a señalar al verdadero ideólogo y  creador de este desastre: Hugo Chávez.

Fernando Marcano
Coord. Juvenil Nacional de Org. Vente Venezuela

@FSMarcano

viernes, 8 de enero de 2016

El presidente no tiene quien le escriba.

La ultimas designaciones y rotaciones ministeriales dentro del gabinete de Maduro, evidenciaron que el gobierno aún se niega a entender la naturaleza de la monumental derrota recibida este 6 de Diciembre y el sostenido crecimiento del rechazo a su gestión y al partido de gobierno, que solamente puede ser comparado por el crecimiento de la tasa inflacionaria en el país. Sencillamente el gobierno se negó a vivir una nueva realidad, que lo aleja cada día más, no solo del poder, sino de sus objetivos de calmar y atajar a la gran disidencia interna.

Precisamente, esa gran disidencia del gobierno no se encuentra detrás de un teclado en Aporrea o mareados de demagogia ideológica socialista como en Marea. Mucha de la disidencia oficialista despachaba también desde el concejo de ministros y desde los altos cargos directivos del PSUV, conduciendo lo que para muchos sigue siendo mera especulación, pero que con el pasar de los acontecimiento se hace cada vez más clara: Una transición interna en el seno del chavismo.

El presidente no tiene quien le escriba, y es por eso, que esta modificación del gabinete no es para luchar contra la inexistente "Guerra Económica", para aumentar la producción interna o incentivar el comercio exterior. El nuevo gabinete está configurado para proteger al régimen de Maduro del conflicto interno y de actores que buscan la salida del poder de este como válvula de escape ante tanto desastre.

La designación de Aristóbulo Istúriz como vicepresidente ejecutivo, es la búsqueda de experiencia política para tejer dos claros puentes, el primero para atajar y operar a la disidencia aguas adentro y la segunda para buscar enlaces de entendimiento con una oposición, que se ha trazado en 6 meses, generar los instrumentos necesarios para la salida de este régimen. Maduro, reafirma sus enlaces existentes con las FANB y los pranes, ratificando a Padrino López y a Varela en sus cargos, pero a la vez profundiza lo que pareciera un punto de honor o de cohesión, el modelo económico.

La designación de Luis Salas como Ministro de Economía Productiva, es una clara señal de viraje, pero no el que esperábamos los venezolanos, sino hacía la burocratización de la resolución de la crisis en materia económica, teniendo como principal filosofía, la negación y la profundización del modelo económico. Mientras en Venezuela se desarrolla el escenario menos obvio, por ser el más natural y predecible, como es la pérdida de poder del gobierno, poco o nada hacen para no seguir hundiéndose en su propio lodo, y con ellos gran parte del país.

Mientras algunos venezolanos se siguen preguntando cómo el ejecutivo solucionará la crisis, la respuesta sigue siendo que la revolución es invencible y que esto es producto de ataques internos y externos. Mientras muchos especulan cómo acabará derrumbándose el régimen, los últimos se siguen viendo vencedores y en el poder bajo cualquier escenario. Mientras tanto, los que se preguntan cómo van a hacer para seguir comiendo, el gobierno necesitó 17 años de errores para responder: "Comeremos Patria".

Fernando Marcano
Coordinador Juvenil Nacional de Organización.
Vente Venezuela.
@FSMarcano  

martes, 25 de agosto de 2015

Estado de exasperación

El decreto de estado de excepción en 6 municipios fronterizos en el Estado Táchira, sin duda alguna es un globo de ensayo para posteriores escenarios que pudiera implementar el gobierno de Maduro para afrontar, lo que sin duda alguna es, el declive de un proceso que ha sido catalizador de la degeneración política, económica y humana de Venezuela. El país sin embargo vive otro estado, uno que no puede ser decretado con fuerza, valor y rango de ley, ni mucho menos por esas artimañas que consagra una constitución para justificar la violencia sistemática del Estado a su población.

Venezuela vive en un estado de exasperación desde hace mucho, uno muy peligroso por las características históricas y la grave crisis humanitaria que  impera en un país, del cual muchos esperaban un cambio desde hace mucho tiempo. La escasez, el alto costo de la vida y la violencia, no son el resultado de una encuesta con una muestra de mil personas, es una realidad latente en 30 millones de Venezolanos, que distintamente su pensamiento político o planteamiento ideológico, no aguantan más las mentiras y los circos que el régimen de Maduro ha establecido y que no resuelven ni dan respuesta al malestar de los ciudadanos.

No son 60 días y una prorroga, como el intento fallido de marcar una agenda que nos haga olvidar los problemas actuales, el tiempo en el cual los venezolanos llevamos soportando los «sacrificios» de mantener un modelo económico y político que no funciona, ha funcionado o funcionará en alguna parte del mundo. Ya son varios años difíciles lo que la familia Venezolana ha sido embestida y golpeada en su dignidad y su temple.

Irritación, frustración, malestar… Arrechera, es lo que se está acumulando en todos los ciudadanos al hacer una cola, al no conseguir un producto, al presenciar descuartizaciones, corrupción e impunidad, entre otras de las tantas plagas que se han esparcido por el país y que muchos no ven salida alguna. Este es el verdadero legado dejado por los irresponsables, este es el verdadero estado que actualmente vive el país, que no es un estado de excepción sino un estado de exasperación.

Fernando Marcano
Coordinador Juvenil de Vente Venezuela Aragua
@FSMarcano

miércoles, 19 de agosto de 2015

De una democracia de partidos a una democracia con partidos.

Desde la primera expresión legitima de los actores civiles en contra de la república militar establecida por Juan Vicente Gómez en el país,  hasta el alcance de lo que sería el primer ensayo de una democracia liberal venezolana con la caída del gobierno del General Marcos Pérez Jiménez, han evolucionado los conceptos y las formas por las cuales el activismo político en el país se ha configurado para darle respuesta, a veces no tan oportuna, a las diferentes demandas del país.

Los partidos políticos en Venezuela se presentaron como la garantía del respeto a las distintas corrientes de pensamientos y proyectos de una sociedad civil que se abría paso hacía la madurez ciudadana y a la modernidad en mucho de sus aspectos cotidianos, incluida la forma de ejercer los derechos y libertades políticas. Como sombras habían quedado aquellos generales de montonera o pretensiones castrenses de erigirse en el poder civil olvidando su vocación institucional, o eso era lo que esperaban los venezolanos.

Los viejos vicios de un pasado cercano fueron consumiendo lentamente a la nueva hegemonía del poder político en el país, donde grandes y pequeños caudillos institucionales, fueron atribuyéndose distintos espacios dentro del contexto nacional, acaparando el direccionamiento y la amplitud necesaria en una organización política hacía su propia humanidad , y las organizaciones políticas a su vez, fueron cerrando los espacios deliberativos y tomando el monopolio, lentamente y a través del clientelismo, del juego democratico en el país, a un alto costo interno y externo.

Esto es fácilmente apreciable en las actuales organizaciones políticas, donde caudillos partidistas pelean en montoneras políticas para asegurar el control de un espacio que le asegure trinchera para la próxima batalla, y a su vez en el país, donde las cabezas de esas organizaciones combaten muchas veces por sus intereses y supervivencia dejando a un lado la reestructuración de una democracia sostenible y sensata.

Aunque ese sea nuestro día a día, muchos actores políticos han entendido la necesidad de apuntar hacía escenarios diferentes, donde los partidos políticos sean elemento clave, más no únicos, de la representación y manejo democrático. La desconcentración del poder, canalizado hacía mayor empoderamiento ciudadano, en conjunto de una descentralización institucional, parecieran ser los mejores acompañantes de una nueva democratización y regeneración en los partidos políticos actuales y un cambio de la realidad del país que nos está conduciendo a una crisis humanitaria.

Pasar de una democracia de partidos a una democracia con partidos, es un reto que va más allá del simple hecho de resolver la actual crisis en el país, debe ser un compromiso moral de todos los ciudadanos en sellar de una vez por todas la garantía del mantenimiento institucional de un país y sepultar de una vez por todas el siglo XX que se ha extendido más de los necesario y ha dejado heridas imborrables en cada uno de nosotros. 

Fernando Marcano
Coordinador Juvenil de Vente Venezuela Aragua
@FSMarcano

martes, 28 de julio de 2015

15 y Último.

Contrario a la creencia, este artículo no trata de las fechas de cobro de sueldos y salarios, sino de los días en que trabajan los efectivos de tránsito. Hace mucho tiempo que vengo analizando esta situación que vivimos los venezolanos diariamente y me refiero específicamente a lo que tiene que ver con la dinámica de transito que se da en diferentes lugares del país y ayer justamente fue uno de esos días…

Normalmente tenemos una anarquía que se apodera desde tempranas horas de la mañana. Autobuses recogiendo gente en cualquier parte y además haciendo doble fila ocasionando largas colas, las paradas son desiertos de basura y destrucción porque los mismos ciudadanos destruyen estos espacios. Los motorizados haciendo de las suyas como todos los días, malabares entre los carros (te pasan por la derecha, por la izquierda), rompen los retrovisores, rayan los carros, se paran sobre el rayado, manejan por la acera, se comen la flecha, el semáforo, y las eternas groserías que reciben por imprudentes. Los carros particulares también se unen a esta anarquía con la excusa perfecta “si ellos pueden, yo también”. Los más triste de todo esto,  es que los que deben dar el ejemplo (policías, militares, altos funcionarios del gobierno, etc.) son los que más rompen las leyes.

Una de las principales características de las leyes de un país es que son aplicables para todos por igual, pero parece que en Venezuela hay unos ciudadanos que son más importantes que otros, que para algunos si aplican las leyes y para otros no. En este sentido quiero dejar una anécdota que me ocurrió en la sede de la Gobernación del Estado Aragua; tenía ya un rato haciendo mi cola para utilizar el ascensor, estos ascensores tienen capacidad para 14 personas, en ese momento llega el ascensor y se montan dos personas que no estaban en la cola y tenían identificación de la gobernación, cuando voy a subirme al ascensor me dicen que no puedo subir en ese porque iba a subir el jefe, llego una tercera persona y subieron. Tenía 15 minutos haciendo cola y tres personas se apoderan de un ascensor por el simple hecho de tener algún cargo dentro de la gobernación. Ese tipo de superioridad chapistica también se da en las calles los 15 y los último.

Todos estos funcionarios que durante 28 días al mes rompen todas las leyes de tránsito (manejan sin cinturón, se pasan los semáforos en rojo, se comen las flechas, tienen las unidades en estados deplorables, hablan por teléfono mientras manejan, conducen motos sin casco, paran el tráfico para darle prioridad a un alto jerarca del gobierno y pare de contar) estos mismos funcionarios tienen dos días que son unos corderitos y quieren aplicar la ley al pendejo pero no para cumplir con la constitución y las leyes, sino que usando la ley pueden conseguir dinero extra “para los refrescos” o el simple descaro de robarle la quincena a una persona bajo la amenaza de remolcarle el vehículo.

Entonces el 15 y el ultimo, amanecen con alcabalas móviles (Muchas de ellas no cumplen con el reglamento) en cada esquina, pregonando y dando lectura a una ley y un reglamento que ninguno de ellos respeta.  En tal sentido la actuación de estos oficiales atenta contra el Articulo 21 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela que habla de la igualdad de todas las personas ante la ley.

Así que percibo que dentro de la zona de comodidad en que vivimos hemos aceptado este tipo de situaciones y las vemos como normales. Hoy quiero alzar mi voz y pedirle a los ciudadanos venezolanos que es momento de exigir que se haga cumplir la constitución y las leyes, pero desde el respeto, no podemos permitir que se nos quiera aplicar una ley que cumplen unos pero otros no.

Recuerda que tu libertad termina donde comienza la mía.

Luis G. Salcedo R.
Coordinador de Organización Vente Venezuela Aragua
Instagram y Twitter: @LGSALCEDO

miércoles, 15 de julio de 2015

Maria Corina Machado con más fuerza

Un golpe más a la democracia en Venezuela deja en evidencia al sr Nicolás Maduro como un dictador, la inhabilitación ilegitima que se la hecho a la venezolana María Corina Machado es producto del miedo y la desesperación por parte de un "gobierno" que durante 16 años solo ha cuartado los derechos, donde los poderes han estado centralizados cuyos objetivos son beneficiar al gobernante de turno, lo vivimos con Hugo Chávez y hoy sigue Nicolás Maduro ese legado de su comandante. Los DDHH en Venezuela desde hace mucho tiempo que no existen en lo largo y ancho de nuestro territorio, es por eso que hoy debemos armarnos de valor y luchar con mas fuerzas contra este régimen que cree que se perpetuara en el poder. 

HOY le decimos a Nicolás que te queda poco en Miraflores, hay una Venezuela comprometida con esta luchadora, una mujer que si quiere a su país y que realmente defiende nuestros derechos sin pelos en la lengua y sin miedo, la juventud quiere cambios y quiere nuevos gobernantes realmente demócratas y vemos en María Corina Machado la esperanza de vivir en democracia, una verdadera democracia, un estado de derecho, los poderes descentralizados, con una economía equilibrada, donde todos lo jóvenes podamos tener un futuro prospero y una oportunidad de vivir libres y emprender.

María Corina Machado seguirá luchando sin descanso como ha venido haciendo durante estos últimos años, al lado de todas aquellas personas que necesitan una mano amiga y que el gobierno no les ha importado en lo absoluto, juntos y unidos en una sola fuerza vamos a fortalecer ese liderazgo que compromete por un mejor país que estoy seguro tendremos en muy poco tiempo.

Javier Caña
Coordinador de Asuntos Universitarios Vente Joven Aragua
@JavierC080



viernes, 26 de junio de 2015

Esequibo: La receta de Malvinas.

La Argentina de 1982 era muy parecida a la actual Venezuela: Un profundo malestar social y político, una alarmante inflación, una constante represión ciudadana y un gobierno de talante militarista. Sea el «Proceso de Reorganización Nacional» argentino o nuestro tropicalizado «Socialismo del Siglo XXI» la indigencia intelectual se nota a leguas, como es común en estos tipos de regímenes.

Otras dos coincidencias es que en ambas coyunturas existe una disputa territorial (con la misma potencia, una directamente y otra indirectamente, para resaltar) Las Islas Malvinas, por el lado argentino, y el Territorio Esequibo, por parte de Venezuela. También compartimos una sociedad que es muy sensible a este tipo de temas por su alta exposición al patrioterismo, fruto de la «historia heroica» de liberación enseñada desde las escuelas, que más que libertadores y ciudadanos, les ha dejado más tiranos y caudillos a los pueblos de América.

Galtieri, no desaprovechó esa oportunidad de poder unificar el criterio de los argentinos en una acción en común y lograr así la supervivencia de su régimen. Y es así, como en abril de 1982, desempolvó un proyecto de la marina de guerra del año 1981 y se aventuró a tomar Las Malvinas (no discutiremos la soberanía de ambos territorios) confiado en que lograría su objetivo, como suele suceder en este tipo de dictadores que padecen esa rara enfermedad llamada «mesianismo», que los hace creer invencibles, omnímodos y exitosos.

El alto mando militar argentino, notificó al general que no estaban preparados para la guerra, pero Galtieri, confiaba en que todo se resolvería de un modo diplomático, donde se llegaría a una decisión consensuada a favor de Argentina, y que el Reino Unido no ejercería acciones militares, porque eso traería como consecuencias la activación del TIAR. Galtieri se equivocó y fue vencido en Malvinas, lo que trajo como resultado el fin de su gobierno y posterior caída del «Proceso de Reorganización Nacional».

Quizás, soy yo el que me aventuro a afirmar que el escenario está dado para que Nicolas Maduro pueda aventurarse y arriesgar una «Receta» similar a la de Malvinas para lograr su objetivo principal en estos momentos: La supervivencia política. Ya en previos anuncios por parte de miembros de su gabinete y diputados del oficialismo, han mostrados las intenciones de tomar cartas en el asunto, acompañados de esa agresividad propia del salvajismo ideológico y político que los caracteriza.

Me atrevería a afirmar, que uno de los escenarios que mejor pinta al gobierno, sería la de iniciar un «Toma y dame» de cancillerías con Guyana (no descartemos tampoco con Colombia, por la situación militar en la Guajira) para poder justificar una agresión, y trata de unificar criterios de los venezolanos, en un punto muy sensible, como es el territorio Esequibo. Es decir, tendrían su «Dakazo» de este año, que será muy difícil para el gobierno gane o pierda las elecciones.

Puede funcionar de dos maneras, la primera es la de tratar de subir sus números con esta acción, que combinada con otras (como puede ser la expropiación de Empresas Polar para vender alimentos por debajo del precio) pueda darle «Pan y Circo» a una sociedad venezolana acostumbrada y ganada a este tipo de acciones. Otra de las formas es la de decretar el Estado de excepción, declarando una conmoción externa, y suspender las garantías constitucionales, incluidas las elecciones del 6D hasta nuevo aviso.


Sea como sea, los venezolanos tenemos que estar muy atentos a las diferentes maniobras que el gobierno pueda realizar en torno a partidizar, y utilizar a su conveniencia, un tema tan sensible como el de la soberanía del territorio Esequibo. Amanecerá y veremos.

Fernando Marcano
Coordinador Juvenil de Vente Venezuela en Aragua
@FSMarcano